Cuando la deuda total supera los activos totales de la empresa, entonces la contabilidad del negocio está en problemas. Los empresarios y emprendedores pueden evitar que el endeudamiento de su negocio se vuelva insostenible. Para lograrlo, deben implementar medidas que faciliten la cobranza, premiar el pago anticipado, y eviten la acumulación de deudas impagas. Un desafío para emprendedores y empresarios en general es detectar a tiempo esta situación antes de que se convierta en insolvencia.
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Son diversas las medidas que un empresario o emprendedor puede implementar para evitar la insolvencia antes de tiempo. Revisémoslas a continuación.
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Ratios financieros hay muchos, pero la contabilidad de la empresa debe manejar éste al revés y derecho. Es una relación financiera que indica el porcentaje de activos de una empresa proporcionales a la deuda.
Esta ecuación consiste en la división del total de activos por el total de pasivos, totalidades que comprenden:
Según explica Enciclopedia Financiera, si el ratio de deuda es alto, es que la empresa está altamente apalancada. A mayor ratio, mayor riesgo para las operaciones y para la capacidad de endeudamiento de la empresa.
Antes de incurrir en nueva deuda, ordena y compara el endeudamiento que ya tiene tu empresa evaluando:
Quizás es más importante para tu empresa liquidar aquellas deudas por vencer que tienen una garantía asociada, como tu casa o un bien necesario para la operación de la empresa.
Bajo el nuevo sistema contable basado en las normas internacionales NIIF (o IFRS por sus siglas en inglés), a partir del 1 de enero de 2019 las empresas en Chile ya no podrán contabilizar los pagos futuros de arrendamientos operativos como gastos. Desde esta fecha, pasan a ser deuda.
Este cambio bajo la norma NIIF 16 tendrá un impacto significativo en la contabilidad, sobre todo en empresas que dependen del arriendo de inmuebles (bienes raíces) o bien equipamiento (activos) para operar mediante leasing. Así, el cambio contable afectará particularmente la contratación de arriendos que se materialicen o funcionen por más de un año.
Este cambio en la normativa implica que las empresas reportarán mayor endeudamiento, mayores gastos por intereses, e influenciará el cálculo del Ebitda ya que el gasto de amortización cambiará.
Según la consultora de contabilidad y auditorías Deloitte, la NIIF 16 significará cambios en cómo la empresa en materia de: análisis de amortizaciones, juicios de arrendamiento, sistemas y procesos de arriendo, cláusulas y contratos de arriendo y contratos de leasing
En la mayoría de las ocasiones, las empresas reeestructuran la deuda ya sea porque no pueden cumplir con los pagos dentro de un plazo o simplemente no tienen dinero para pagar. Este proceso de renegociación adelanta el pago de parte de la deuda original y repacta el pago del diferencial con una nueva obligación.
Sin embargo, la reestructuración puede pasar totalmente desapercibida en la contabilidad si es que la nueva deuda no tiene términos sustancialmente diferentes con la deuda original, según explica la firma consultora Ernst Young.
Si es una deuda sustancialmente diferente a la deuda inicial, del punto de vista contable este monto es “dado de baja” en el balance de pasivos financieros. Si no lo es, prácticamente todo sigue igual para la contabilidad.
La normativa contable chilena exige realizar dos pruebas para analizar la diferencia entre la deuda original y la deuda reestructurada, dependiendo del caso según explica EY:
Si la diferencia es mayor que el 10 %, la modificación es “sustancial”.
Si la diferencia es menos que el 10%, se aplica el test cualitativo.
Considerando el porcentaje que salió en el Test del 10%, la contabilidad debe observar variables como: cambio de moneda, cambios en el nivel de subordinación de la deuda, cambios significativos en el plazo de vencimiento y cambios significativos en el interés.
La empresa debe “dar de baja” la deuda origina en el balance general y reconocer la nueva por su valor razonable. La diferencia entre ambos importes quedará visualizada en los resultados generales.
Asimismo, deberá reconocer las comisiones incurridas en la reestructuración contra resultados.
La empresa simplemente debe reconocer las comisiones de reestructuración contra el saldo de la deuda en sus pasivos totales y re-calcular el tipo de interés efectivo (considerando los nuevos flujos).
De acuerdo a EY, las empresas en general prefieren que la reestructuración de la deuda sea considerada igual que la versión anterior.
Esto es porque no cambia el resultado contable o bien no genera diferencias para contabilizar las comisiones pendientes del antiguo préstamo como las comisiones de la reestructuración.
En cambio, si el nuevo préstamo es considerado «distinto», el nuevo balance debe reconocer la diferencia entre ambos importes contra la cuenta de resultados generales. Y las nuevas comisiones por reestructuración también se reconocen contra resultados.
El factoring o factorización electrónica consiste en que la empresa “vende” sus facturas o cuentas por cobrar a una empresa financiera especializada, conocida como empresa de factoring o factor.
Normalmente, las Pymes y los emprendimientos ocupan esta modalidad para financiar desfases de tiempo o descalces entre una venta y el pago de la cuenta por cobrar.
Entre otras importantes razones que llevan a las empresas a optar por el factoring están:
Según explica la Bolsa de Productos de Chile, del punto de vista contable, el registro del factoring dependerá de si el cliente deudor de la empresa paga o no la cuenta pendiente, y de si el factoring se entregó con o sin recurso.
Sin embargo, al igual que la reestructuración de deuda, la empresa no debe esperar hasta el último minuto o llegar a niveles insostenibles de deuda para optar por el factoring.
El hecho de que sea una alternativa de financiamiento de más fácil acceso que un crédito bancario, no significa que el contrato de factoring sea llegar y llevar. Queda en manos de la empresa de factoring evaluar si la empresa solicitante del servicio está en condiciones de tomar esta herramienta financiera.
Si para solucionar el endeudamiento de tu empresa necesitas comenzar a realizar cobranzas judiciales o extrajudiciales, escríbenos aquí para ayudarte.