Aprenda más sobre el recurso de amparo en este artículo, acción que nuestra Constitución Política de la República otorga a todas aquellas personas que se encuentran privadas de libertad, ya sean detenidos, presos o arrestados de manera ilegal.
Ver más en: Qué es un recurso de protección y cómo se presenta.
El recurso de amparo es aquella acción que la Constitución concede a toda persona detenida, presa o arrestada con infracción a la Constitución o a la ley, o que sufra cualquier otra privación, perturbación o amenaza en su derecho a la libertad personal y seguridad individual.
La libertad personal es el derecho que tiene toda persona para residir y permanecer en cualquier lugar de la república, trasladarse cuando lo desee de un punto a otro, así como entrar y salir del territorio nacional, siempre y cuando cumpla con las normas vigentes.
El objetivo del recurso de amparo es que el afectado que ha sido privado de libertad injustificadamente, sea llevado frente a un juez para que revise y evalúe la legalidad de la privación de libertad. En el caso de que se compruebe de que ha sido detenido injustamente, se decretará su libertad inmediata o se pondrá al individuo a disposición del juez competente. De esta forma, se busca restablecer el derecho vulnerado y asegurar la debida protección del afectado.
De acuerdo a lo anterior, hay dos tipos de amparo que se pueden interponer:
Puede interponer un recurso de amparo toda persona natural. De acuerdo a esto, la persona que interponga un recurso de amparo puede ser el propio afectado o cualquier otro en nombre del afectado.
No se necesita del patrocinio y representación de un abogado para interponer un recurso de amparo, aunque es recomendable para no cometer errores y optimizar el tiempo.
Para el amparo correctivo es competente el Juez de Garantía o bien el juez del lugar donde esté el afectado. En el caso de amparo preventivo, que es el recurso de amparo propiamente tal, corresponde hacerlo en la Corte de Apelaciones del domicilio del afectado.
Se trata de un recurso que carece de formalidades para su interposición. El único requisito es no haber hecho uso de cualquier otra acción legal.
No hay plazos para interponer el recurso de amparo en tanto se mantenga la privación, amenaza o perturbación de la libertad.
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